Cada vez más marcas invierten en campañas de influencers. El año pasado el número de empresas relacionadas con influencers se disparó un 25%. Y este año el mercado espera que el gasto mundial en este tipo de marketing alcance los 16.000 millones de euros.
Un dato esclarecedor lo vemos en los institutos, donde los estudiantes identifican la profesión de "creador" como su carrera preferida. Incluso las estrellas del cine se han pasado a la creación de contenidos para seguir siendo relevantes. En los últimos años la definición de fama ha cambiado a medida que más gente normal gana dinero como creadores de contenidos, "influencers", en TikTok e Instagram.
En este sentido, pronto podríamos ver también el auge de las compras en directo que ya han arrasado en China. Se espera que esta acción, que consiste en que los influencers interactúen con los fans para una experiencia de compra inmersiva, se convierta en una industria de 25.000 millones de euros en 2025.
Lo que parece claro es que, a medida que aumente la interacción de los usuarios con los influencers, estos exigirán una mayor compensación. Y aquí la clave será ver si el contenido de los influencers se expande a las plataformas Web3, donde la dinámica de poder de la economía de los creadores cambiaría por completo.
Las plataformas Web 3 facilitarán la monetización de la creación de contenidos. Web3 podría ayudar a los creadores a diseñar fichas sociales y a gestionar modelos de "jugar para ganar" o "ver para ganar" dentro de sus comunidades. Once plataformas de creadores alcanzaron el estatus de unicornio en 2021, y otras tres ya han hecho lo propio en 2022. En la nueva economía de los creadores, estos podrán crear riqueza a través de flujos de ingresos pasivos basados en la comunidad, en lugar de depender de una única plataforma.
Todos los miembros de la comunidad podrían ser pronto creadores que reciban una compensación por su tiempo y energía, lo que podría desbloquear una nueva generación de creación de riqueza.
En TikTok, la plataforma de moda, se sabe que la presencia de creadores en un vídeo es necesaria para que éste pueda tener éxito. Algunas voces autorizadas aseguran que el nivel de engagement de un vídeo de TikTok aumenta en un 93% si el mismo presenta una figura eficaz en la comunicación y reconocible para el público objetivo.
