Se espera que la Playstation VR2 de Sony, el Proyecto Cambria de Meta y el VR de Apple incluyan el seguimiento ocular. Esta tecnología pretende hacer que el Metaverso sea más interactivo para los usuarios.
Sin embargo, a los defensores de la privacidad les preocupa que, si no se regula, esta inmersión se produzca a costa de una recopilación de datos personales muy invasiva.
El año pasado, investigadores alemanes descubrieron que captar el movimiento de los ojos implica una gran cantidad de información personal, como la edad, el sexo, el estado de salud, el consumo de drogas e incluso el tipo de personalidad.
Con esta tecnología, las empresas también pueden rastrear la mirada de un usuario para crear un mapa de calor, y con ello, vender publicidad. De hecho, MoviePass ya lo hace para asegurarse de que los usuarios ven los anuncios en su aplicación.
Si a esto le añadimos que con esta tecnología el Metaverso se sentirá cada vez más real, entramos en terrenos distópicos que cada vez son menos ficción. Las gafas de VR con eye-tracking podrán rastrear las áreas en las que se centran tus ojos y renderizarlas con mayor detalle.
También permitir a los avatares establecer contacto visual contigo o incluso dar la posibilidad al usuario de utilizar su mirada como controlador de su avatar en el Metaverso.
En esta dirección, lo último que hemos leído es sobre unas patentes de Apple que permitirán proyectar la realidad aumentada directamente en nuestra retina. Un sistema que puede solucionar esos dolores de cabeza o mareos que causan los actuales sistemas de VR. Y, ¿por qué lo solucionan? Pues porque el cerebro no será capaz de reconocer que lo que ve no es real.
Espero que regulemos esto antes de que sea tarde. La cantidad de problemas sociales que esto puede generar da miedo.
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